‘Yo Vencí a Hitler’: Irene Shashar (nee Lewkowicz)

Revista Caretas

Irene Shashar
Irene Shashar (nee Lewkowicz)

«Son flashes, momentos”, explica a su manera. “Solo recuerdo la diaria lucha por sobrevivir, por comer, por esconderme”. Irene Shashar mira las fotografías e intenta conectarlas con los pedazos de su memoria. “No tuve calendarios ni noción de continuidad de lo que sucedió”, dice. Sabe que fue afortunada. Tenía solo un año cuando el blitzkrieg nazi arrasó Polonia. Era el 1 de setiembre de 1939.

Irene Shashar se llamaba entonces Irene Lewkowicz Kirszenbeg. Era solo una niña más en medio del enorme ghetto judío de Varsovia. No tenía idea de lo que significaba Treblinka ni de la realidad que vivía Europa. Sobibor, Majdanek, Chelmno, Belzec, Auschwitz. Todo lo que estaba en el horizonte había sido diseñado para quebrar el espíritu de los hombres. ¿Qué podía hacer una niña al respecto? Solo intentar ser invisible. Fue así que Irene sobrevivió seis años junto a su madre, Helena. Vivieron en cubículos, armarios y demás rincones inhóspitos. Ambas lograron escapar por el desagüe del ghetto, junto a las ratas.

En el París de la posguerra la situación empezó a mejorar. Helena Lewkowicz puso a su hija en el orfelinato Le Manoir de Denouval, en un pueblo llamado Andrésy, a 50 km al oeste de la capital.

Irene Lewkowicz y su madre, Helena Lewkowicz, Paris 1946
Irene Lewkowicz y su madre, Helena Lewkowicz, Paris 1946

La pequeña Irene era la única niña polaca entre tantos huérfanos franceses. Allí aprendió a leer y escribir por primera vez. Era 1946. Dos años después, Helena moriría de un ataque al corazón. “Tenía 10 años cuando la perdí”, recuerda Shashar. “Su único propósito en la vida fue salvarme a mí, antes que salvarse a sí misma”.

En julio de 1948 alguien más decidió salvarle la vida. Esta vez fue Don Isaak, viejo patriarca de la familia Topilsky. Él sabía que su hijo Michel vivía con relativa comodidad junto a su nuera Felicia, prima hermana de Helena Lewkowicz. Ellos también eran sobrevivientes del Holocausto. Tal vez por eso al tío abuelo Isaak Topilsky le pareció natural que ellos se hiciesen cargo de la aún pequeña Irene. Fue así como la niña fue a parar a la calle Prescott 236, en San Isidro, Lima.

Irene Lewkowicz, Felicia y Michel Topilski. Lima
Irene Lewkowicz, Felicia y Michel Topilski. Lima

Isaak Topilsky viajó con ella al Perú. Nunca más se apartó de su lado. Falleció el 12 de abril de 1954.

Irene se graduó en el primer puesto de la primera promoción del Colegio León Pinelo. Luego estudió lingüística en la Universidad de Nueva York y, finalmente, respondió al llamado de la sangre al viajar a Israel. Iba a quedarse tres semanas pero terminó asentándose durante cuarenta años. Allí se casó, tuvo a sus dos hijos y se convirtió en profesora de la Universidad Hebrea de Jerusalem.

Años más tarde viajó a Polonia con su hija. Allí descubrió que su certificado de nacimiento había desaparecido junto al de miles de personas. Los nazis le habían quitado hasta su identidad.

Dice que nunca sintió pena. “Me siento orgullosa de haber sobrevivido”, concluye. La felicidad plena, sin embargo, llegó recién con el primer nieto. “Mis hijos no tenían abuelos”, explica, como quien habla de una ausencia inocultable en la familia. “Cuando fui abuela recién me di cuenta de que había vencido a Hitler”, confiesa. “Yo vencí a Hitler. Él murió, yo estoy viva. La tercera generación es la prueba.” Hoy, su nieto Yarden tiene 11 años de edad.

Cuando recuerda lo más difícil, piensa en el sentido que tuvo su propia existencia. “Soy sobreviviente y debo merecerme serlo”, se repite a sí misma. “No hay casualidad: hay causalidad. Sobreviví para ser la voz de aquellos que no pudieron hacerlo”. Y mientras lo dice no dejan de abrazarla y saludarla y pedirleselfies y autógrafos. Es la ponente principal de un evento en el Museo de la Comunidad Judía del Perú. Pero para ella es solo un día más de vida.


(Escribe: Carlos Cabanillas, Revista Caretas)

El rol del pueblo de Israel

Publicado Oct 11, 2014

Si analizamos la historia de la humanidad, vemos que a la hora de hablar de antisemitismo a nadie le ha importado cuantos premios Nobel hemos tenido, ni cuantos descubrimientos o nuevas tecnologías le hemos brindado a todo el mundo. Esto tiene una razón que hoy compartimos con ustedes, ¡juntos podemos resolverlo y revertir el antisemitismo en todo el mundo!

Fuente: www.comounmanojo.com

Auschwitz

Published on Feb 3, 2015

Auschwitz, a brand new 15-minute documentary on the history of the Nazi death camp, produced by Steven Spielberg and narrated by Meryl Streep, will be permanently installed at the Auschwitz Memorial. The documentary had its premiere yesterday, in the presence of 300 Holocaust survivors. #PastIsPresent #Auschwitz70 – with USC Shoah Foundation

Para entender el Islam

Moshe Sharon
Profesor de Historia Islámica,  Universidad Hebrea de Jerusalén

El «fundamentalismo» es un término proveniente del corazón de la religión cristiana. Significa fe que se obtiene por la palabra de la Biblia. Ser un Cristiano Fundamentalista, o seguidor de la Biblia, no significa ir por todos lados asesinando personas. El fundamentalismo islámico no existe tampoco. Es sólo Islam y punto. Más bien la pregunta que nos deberíamos hacer es cómo interpretamos el libro del Corán.
Vemos repentinamente que los más importantes voceros e intérpretes del Islam son políticos de Occidente. Ellos conocen más que todos los oradores de las mezquitas, esos que gesticulan horribles sermones en contra de todo lo que sea judío o cristiano. Los políticos occidentales identifican un Islam bueno y un Islam malo, sabiendo inclusive hallar las diferencias existentes entre ambos. Pero existe un problema, ninguno de estos intérpretes occidentales sabe leer una palabra en árabe.

El Idioma del Islam. Como se ve, mucho es lo que se oculta tras el lenguaje de lo políticamente correcto, de hecho se ha perdido la verdad. Por ejemplo, cuando en occidente hablamos sobre el Islam, tratamos de utilizar nuestro idioma y aplicar nuestra terminología. Hablamos del Islam en términos de democracia, fundamentalismo, parlamentarismo y toda clase de términos tomados directamente de nuestro léxico. Mi profesor, uno de los principales orientalistas en el mundo, dice que hacer esto equivale a un reportero tratando de escribir una nota sobre un partido de críquet usando términos del béisbol. No se puede utilizar para una cultura o civilización el lenguaje de otra. Para el Islam, usted tiene que utilizar el idioma del Islam.

Principios del Islam. Permítaseme explicar los principios que rigen la religión del Islam. Por supuesto, todo musulmán reconoce el hecho de que hay sólo un Dios. Pero esto no es suficiente. Un musulmán reconoce no sólo el hecho de que hay un Dios, sino que Mahoma es su profeta. Sin estos fundamentos de la religión, no se es musulmán. Pero por sobre todo, el Islam es una civilización. Es una religión que primero y antes que nada establece un sistema legal exclusivo que sumerge individuos, sociedad y pueblos con reglas de conducta. Si usted es musulmán entonces debe comportarse según las reglas del Islam, las cuales son establecidas en el libro del Corán y difieren notablemente de las enseñanzas contenidas en la Biblia.

La Biblia. Expliquemos las diferencias: Desde el punto de vista de los eruditos y estudiosos, la Biblia relata el nacimiento del espíritu de una nación en un largo período de tiempo. Pero más importante aún, la Biblia conduce a la salvación, y lo hace de dos maneras. El judaísmo conduce a la salvación nacional – no solamente la nación queriendo tener un estado, sino una nación deseosa de servir a Dios. Esta es la idea que se encuentra detrás del relato bíblico hebreo. El Nuevo Testamento, que se nutre de la Biblia Hebrea, lleva igualmente a la salvación, pero personal. Luego, tenemos dos clasificaciones de salvación, las cuales con frecuencia se unen o yuxtaponen. La palabra clave es salvación y ésto significa que todo individuo es guardado por Dios Mismo quien lo guía a la salvación por medio de Su palabra. Es la idea contenida en la Biblia, ya sea que nos refiramos al Antiguo o Nuevo Testamento. Todas las leyes en el texto bíblico, hasta las más pequeñas, apuntan en realidad hacia este hecho de la salvación. Otro punto sobresaliente de la Biblia es la idea de que el hombre fue creado a imagen y semejanza de Dios. Esto intuye que usted no anda por ahí destruyendo la imagen Divina. Por supuesto, muchas personas toman las reglas de la Biblia para cambiarlas por completo. La historia es testigo de las masacres hechas en el nombre de Dios y de Jesús. No obstante, tanto el Judaísmo como la religión Cristiana hablan de honrar la imagen de Dios y sobre la esperanza de salvación, siendo éstos sus dos fundamentos básicos.

La Esencia del Islam. Veamos ahora la esencia del Islam. El Islam nace con la idea que debe gobernarse al mundo. Establezcamos un contraste entre las tres religiones. El Judaísmo habla de la salvación de un pueblo – simplemente que al final de la historia, cuando el mundo sea un mejor lugar para vivir, Israel como nación habitará en su propia tierra, gobernado por su propio rey y sirviendo a D’os. Por su lado el Cristianismo plantea la idea de que todos los habitantes del mundo pueden salvarse de sus pecados. El Islam por su parte habla sobre gobernar al mundo. En este momento podría hacer una cita directa en árabe de lo que dice el Islam, pero este no es el objetivo, así que lo haré en inglés, dice así: «Alá envió a Mahoma con la religión verdadera para gobernar sobre todas las religiones». La idea, entonces, no es que todo el mundo se convierta en musulmán, sino que el mundo entero se someta a la autoridad y dominio del Islam. En el año 634 DC, al establecerse el imperio Islámico, en siete años – 640 DC – se crea el centro del imperio. Se tomaron leyes y normas directamente del Corán y de la tradición atribuídas al profeta Mahoma, para crear un sistema jurídico o legal. Tanto judíos como cristianos podrían convivir bajo el régimen Islámico con la condición de cancelar un impuesto comunitario y aceptar la superioridad Islámica. Obviamente, los judíos y cristianos bajo el Islam fueron humillados y sigue siendo hoy así.

Mahoma Sostiene que Todo Profeta Bíblico es Musulmán. Mahoma reconoció la existencia, antes de él, de los profetas de la Biblia. Sin embargo, también Mahoma dijo que todos estos profetas eran musulmanes. Abraham era musulmán. De hecho, el mismo Adán fue el primero de ellos. Igualmente Isaac, Jacob, David, Salomón, Moisés y Jesús fueron musulmanes y todos sus escritos son similares al Corán. En conclusión, debido a que la totalidad de sus héroes fueron musulmanes la historia mundial es en realidad la historia del Islam. De la misma forma, los musulmanes han aceptado el hecho que los profetas bíblicos traen consigo algún tipo de revelación. Según ellos Moisés, trajo el Taurat, que equivale a la Torah, y Jesús trajo el Ingeel, que equivale al Evangelio – y se conoce como Nuevo Testamento. La Biblia vs. el Corán. Luego, ¿porqué la Biblia no se parece en nada al libro del Corán? Mahoma explica que tanto judíos como cristianos falsificaron los libros. Si los judíos y cristianos no hubieran falsificado y cambiado sus escritos, la Biblia sería idéntica al Corán. Sin embargo, debido a que cristianos y judíos poseen algo de la verdad y revelación, el Islam concede no destruirlos (por ahora) en una guerra. Pero las leyes islámicas son muy claras – los judíos y los cristianos no tienen derechos a existir independiente. Pueden vivir bajo la norma del Islam que se les proporcione sometiéndose a las reglas promulgadas especialmente para ellos por el mismo Islam.

El Dominio Islámico y la Yijad. ¿Qué sucede si los judíos o los cristianos no desean vivir bajo las reglas del Islam? Entonces sencillamente el sistema islámico tiene que luchar contra ellos. A esta lucha se le llama Jihad.  Jihad quiere decir guerra contra aquellos que no están dispuestos a aceptar el dominio superior islámico. Sean judíos, cristianos, politeístas o de cualquier religión. Esto es Yijad como no tenemos tantos politeístas, al menos no en Medio Oriente – la guerra se centra principalmente en judíos y cristianos. Hace poco, leí un panfleto distribuido por Osama bin Laden. En él se hace un llamado a Jihad contra el principal líder del mundo cristiano: los Estados Unidos. No porque los norteamericanos sean aliados de Israel, sino por haber mancillado con sus mugrientos pies la tierra sagrada de Arabia. Hay estadounidenses donde los no-cristianos no deberían estar. En el panfleto no se hace una sola referencia a Israel. Sólo habla de la profanación hecha por los Estados Unidos al hogar del profeta Mahoma.

Las Dos Casas. El Corán percibe al mundo dividido en dos – una parte, sometida en el presente al dominio del Islam y otra parte a someterse supuestamente en un futuro. En el Islam hay muy clara separación del planeta. Cada nuevo estudiante del Islamismo lo sabe. El mundo es considerado Dar al-Islam (casa del Islam) – es decir, el lugar donde el Islam gobierna – y el resto del mundo se denomina Dar al-Harb – es decir, casa de la guerra. El Islam no lo llama «casa de los no-musulmanes», sino que lo califica como «casa de la guerra». Es la casa de la guerra la que será conquistada al final de los tiempos. El mundo continuará siendo casa de la guerra hasta que se someta al total dominio y soberanía del Islam. Así dice la norma, pero ¿porqué? Sencillamente, por que así lo declara Alá en el Corán. Alá ha enviado su profeta Mahoma y la religión verdadera para que la verdad triunfe y someta al resto de las demás religiones.

La Ley Islámica. Dentro de la visión del Islam sobre este mundo existen igualmente estrictas normas que rigen la vida común de los mismos musulmanes. Básicamente en el Islam no existen diferencias entre sus escuelas legales. Se pueden observar no obstante cuatro corrientes o facciones dentro del Islamismo en lo relativo al minucioso detalle de las leyes. En todo el mundo las naciones islámicas siempre han favorecido alguna de estas escuelas o corrientes. La escuela de leyes islámica más rigurosa se llama Hanbali, y su origen proviene principalmente de Arabia Saudita. En la escuela Hanbali no hay sitio para juegos ni coqueteo con las palabras. Si el Corán habla de guerra, entonces significa guerra sencillamente. Por siglos el Islam se ha caracterizado por perspectivas e interpretaciones diferentes. Gente muy valiosa atraída por las enseñanzas del Islamismo ha querido entender las cosas de manera diferente. Incluso se ha intentado extraer tradicionalismos de boca de los profetas con el fin de que mujeres y niños no sufran o mueran como consecuencia de la guerra. Existen así mismo tendencias mucho más liberales, pero no debemos olvidar que la corriente Hanbali es la más estricta siendo hoy por hoy la escuela que mayoritariamente se encuentra detrás de los actos terroristas en el mundo.. Podemos hacer referencia a otras escuelas de leyes Islámicas, pero al hablar de la lucha contra los judíos o los Estados Unidos, es siempre la escuela de Hanbali la que resalta, se sigue y obedece.

Tierras e Islam. La civilización del Islam creó una importante y fundamental regla en relación con la tierra y es que ningún territorio sometido al dominio islámico podrá alguna vez ser des-islamizado. Si el enemigo (no-musulmán) logra conquistar el territorio dominado antes por el Islam, éste se considerará siempre propiedad del Islam. De ahí que cada vez que se haga referencia al conflicto árabe-israelí, se escuche la palabra – territorios, territorios y más territorios.. El conflicto árabe-israelí encierra otros aspectos, pero el tema de la tierra es clave. El Islamismo no sólo ve la civilización cristiana como un adversario religioso, sino que la considera un tropiezo, un muro de contención, una molestia en el logro de las metas y fines islámicos. El propósito del Islam es servir de fuerza militar divina, es decir el ejército de Alá, donde cada musulmán se convierte en un soldado de este ejército. El musulmán que entrega su vida luchando por diseminar y extender la cultura islámica se constituye en un shaheed (mártir) no importando la forma que muere, porque – y he aquí lo importante – se trata de la guerra eterna entre dos civilizaciones. Luego, el conflicto bélico nunca termina. Es una guerra que está allí porque Alá lo diseñó así. El Islam debe someter, regir y gobernar. El conflicto  bélico nunca tiene fin.

Islam y Paz. En el Islam la paz únicamente puede existir dentro del mismo mundo Islámico; hay paz sólo entre musulmanes. Para los llamados no-musulmanes, es decir los enemigos del Islam, sólo puede haber una opción – un cese al fuego hasta que el guerrero de Alá adquiera mayor poder. Es una guerra que continúa hasta el final de los tiempos. La paz sólo puede venir si el lado Islámico obtiene la victoria. En esta guerra las civilizaciones disfrutan únicamente de períodos de suspensión del fuego. La medida tiene su origen en un importante precedente histórico, al cual hiciera casualmente referencia Yaser Arafat al hablar en Johannesburgo después de la firma de Israel de los Acuerdos de Oslo. Permítaseme recordar que aunque el documento de Oslo trata sobre paz – si lo lee usted ¡no lo creerá! Pensará que está leyendo algún relato de ciencia-ficción. Es decir, al leer los Acuerdos de Oslo no podrá creer que el documento fue firmado por los israelíes, gente tan versada y conocedora de la política y civilización Islámica. Semanas después de la firma de los Acuerdos de Oslo, Yaser Arafat habló en una mezquita en Johannesburgo pronunciando un discurso donde pedía disculpas: «¿Creen ustedes que firmé algo con los judíos contrario a lo que dicen las reglas de nuestro Islam?» (a propósito, tengo una copia grabada de este discurso de Arafat y lo he escuchado de su propia boca). Y continúa Arafat: «No es así. He hecho exactamente lo que el profeta Mahoma hizo». Cualquier cosa que se supone hizo el profeta Mahoma es un precedente. Lo que Arafat estaba diciendo era: «Recuerden el relato de Hudaybiya». En ese lugar el profeta hizo un acuerdo de paz por 10 años con la tribu de Kuraish. Pero a los dos años Mahoma entrenó a 10.000 soldados para marchar posteriormente sobre la Meca, ciudad de los Kuraishis. Obviamente, Mahoma siempre tenía algún pretexto. Así, en la jurisdicción Islámica, hay ahora un precedente legal que permite establecer acuerdos de paz por un máximo de 10 años. Pero, la Jihad (romper los acuerdos de «paz») debe reactivarse en el primer momento disponible. En Israel ha tomado más de 50 años a nuestro pueblo entender que no se puede discutir sobre paz (permanente) con los musulmanes. Al mundo occidental le tomará otros 50 años comprender que hoy se encuentra en estado de guerra con la pujante y fuerte civilización islámica. Debemos de una vez entender que al discutir sobre guerra o paz, no podemos enfocar el tema en términos belgas, franceses, ingleses o alemanes. Se habla de guerra o paz siempre en términos del Islam.

El Cese del fuego como Táctica. ¿Qué hace que el Islam acepte o no un alto al fuego? En realidad una sola cosa – un enemigo demasiado duro y fuerte. El cese a toda acción bélica constituye solo una medida táctica. A veces, el Islam tendrá que acordar un cese de las hostilidades en condiciones humillantes, y esto está permitido porque Mahoma también aceptó un cese al fuego en condiciones parecidas. Es lo que Arafat expresó con tanta vehemencia en Johannesburgo. Cuando los políticos de occidente escuchan estas cosas rápidamente responden: «¿De qué me habla? Usted vive en la Edad Media. Usted no entiende los mecanismos modernos de la política y la diplomacia». Pero ¿cuáles mecanismos? No hay sitio para mecanismos políticos donde rige y acciona el poder. Además, quiero decir que – todavía no hemos visto el sangriento final. En el momento que el poder radical musulmán se apropie y controle de armas de destrucción masiva – químicas, biológicas o atómicas – éstas serán empleadas. No tengo la menor duda de ello. Ahora que por fin sabemos que enfrentamos una guerra y que lo máximo que podemos obtener de ella son treguas transitorias, debemos preguntarnos cuál es el mayor componente en el cese al fuego árabe-israelí. Y es que el bando islámico es débil mientras el otro lado es fuerte. En los últimos 50 años, desde el establecimiento de su Estado, las relaciones entre israelíes y el mundo árabe se han basado exclusivamente en el poder disuasivo.

Cuando hay Islam, hay Guerra. Lo que tenemos hoy en Yugoslavia y en otros países es debido a que el Islam logró meterse en estos sitios. Dondequiera que se permita el acceso al Islam, habrá guerra. La guerra viene simplemente como consecuencia de la actitud misma de la civilización Islámica. ¿Porqué se asesina salvajemente a los pobres de Filipinas? ¿Qué es lo que realmente pasa entre Pakistán y la India?

Infiltración Islámica. Otro aspecto adicional que debemos recordar. El mundo Islámico no sólo se manifiesta abiertamente mediante una actitud bélica, sino que también batalla por infiltrarse. Una de las cosas que Occidente no entiende ni presta mayor atención es el hecho del tremendo crecimiento y desarrollo actual del poder Islámico dentro de las sociedades occidentales. Lo que sucedió en Norteamérica y en las Torres Gemelas hace poco no es algo que vino de afuera, sino de adentro. Y si Estado Unidos no despierta, un día de estos los norteamericanos se levantarán afectados – en el mismo país – con una guerra química o probablemente nuclear.

El Final de Los Tiempos. Es relevante entender cómo cada civilización percibe el final de los tiempos. Sea Cristianismo o Judaísmo, sabemos exactamente la visión de los tiempos del fin. En el Judaísmo, es referida por Isaías – paz entre las naciones, no sólo una, sino todas las naciones. La gente no tendrá necesidad de armas y la naturaleza misma sufrirá un cambio – un hermoso fin de días y el reino de Dios gobernando sobre la tierra. Paralelamente, el Cristianismo muestra en el libro de Apocalipsis el día que Satanás será destruido. Desaparecerá el poder de las tinieblas y del mal. Esta es la visión Cristiana. Veamos como el Islam concibe este tiempo. Hablo ahora como historiador.. Para el tiempo final, el Islam ve al mundo completamente musulmán, bajo dominio total Islámico. Victoria completa y final. No habrán cristianos, porque según las tradiciones Islámicas, los musulmanes ahora en el infierno deben ser reemplazados por otros, y los otros son los mismos cristianos. Tampoco existirán judíos, porque antes de la venida del fin de los tiempos, estallará una guerra contra los judíos donde todos serán destruidos. Citaré ahora el enfoque de la mismísima tradición Islámica, de los libros leídos por los niños musulmanes en las escuelas: Todos los judíos morirán. Huirán para ir a esconderse detrás de los árboles y de las piedras, y en ese día Alá dará bocas a las piedras y a los árboles para expresar: «Oh, Musulmán, acércate aquí, hay un judío detrás de mí, asesínalo». Esto es fundamental en el Islam. Sin lo anterior, el fin de los tiempos no puede llevarse a cabo.

¿Es Posible Poner Fin a Esta Danza Bélica? La pregunta que en Israel nos hacemos es qué pasará con nuestro país, ¿hay posibilidades de terminar con esta danza bélica? La respuesta es: «No. No, en un futuro inmediato». Lo que sí podemos hacer es buscar la situación donde podamos conseguir relativa calma por algunos años. Para el Islam, el establecimiento del Estado de Israel revirtió la historia del Islamismo. Primeramente, según el Islam el territorio islámico fue arrebatado por los judíos a los musulmanes. Ahora sabemos que para el Islam ceder un pequeño pedazo de tierra ni siquiera es aceptable. Así que todo aquel que piensa que la ciudad de Tel Aviv es un sitio seguro para vivir comete un gravísimo error. Tierras que alguna vez fueron sometidas al Islam, son ahora territorio de los no-musulmanes o infieles. Infieles, como los Judíos, son independientes del dominio Islámico y han logrado crear su propio estado independiente. Para el Islam esto constituye anatema. Y aquí lo peor, Israel, estado no-musulmán, gobierna libremente sobre los musulmanes. Para el Islamismo esto es completamente inconcebible. Soy de los que creen que la civilización de Occidente debe mantenerse en unidad y apoyarse mutuamente. Aunque  reconozco que no sé si esto será posible. Aun así, es Israel quien se encuentra en la línea frontal de batalla en la guerra entre civilizaciones. Israel necesita el apoyo de su civilización hermana, necesita la ayuda de Norteamérica y de Europa. Israel necesita la solidaridad de todo el mundo cristiano. De una cosa estoy seguro. El creyente cristiano puede ayudar y ver esta oportunidad como camino de salvación.
Nota: Clase magistral comparada para entender el Islam por el profesor Moshe Sharon, profesor de Historia Islámica en la Universidad Hebrea de Jerusalén


 

Stav Shaffir: Que es sionismo?

Stav Shaffir, la miembro de la Knesset mas joven de la historia (29 años)  (partido «Avoda»).


 

Not yet 30, Israel’s youngest lawmaker is already a legend

Video of Stav Shaffir’s impromptu ‘Who Is a Zionist’ speech goes viral after social justice activist catapults to No. 2 spot in Labor primary.
By Judy Maltz | Feb. 2, 2015 | 4:29 PM

She had once dreamed of becoming an astronaut. Later on, it was music that beckoned. In between, she dabbled in journalism and community service.

But a career in politics was never quite on the agenda. And certainly never in her wildest dreams did Stav Shaffir of Isael’s Labor Party imagine that by this stage in her life she would have achieved something verging on political stardom.

It’s not just the big messy mane of red hair that distinguishes this high-energy lawmaker from her Knesset colleagues, who often refer to her as the gingit, Hebrew for “redhead.” At 29, Shaffir is the youngest member of the outgoing Knesset and the youngest woman ever to serve as an Israeli lawmaker. If Zionist Camp ends up forming the next government, which recent opinion polls indicate is a distinct possibility, she could very well become the youngest woman ever to sit in the Israeli cabinet.

An impassioned address Shaffir recently delivered in the Knesset is sure to go down as one of the big moments of the 2015 election campaign. Barely a handful of Knesset members were present when Shaffir took the podium, but the YouTube video of her three-minute speech — which has become popularly known as the “Who Is a Zionist” speech — became an immediate sensation on social media.

Accusing the political right of misappropriating public funds to serve its own interests, and particularly those of its settler supporters, she cried: “Don’t preach to us about Zionism, because real Zionism means dividing the budget equally among all the citizens of the country. Real Zionism is taking care of the weak. Real Zionism is solidarity, not only in battle but in everyday life.”

Shaffir’s comments were an unplanned response to statements made by the head of the religious right-wing Habayit Hayehudi party, Naftali Bennett, she told Haaretz this week. “It was completely improvised,” she said. “We had come to the Knesset to vote on raising the minimum wage, when Naftali Bennett got up and started attacking my party. It made me really angry, and I decided I had to respond.”

The fact that the video of that impromptu speech went viral, said Shaffir, proves to her that “the Israeli public yearns for politics of hope and is sick of the politics of despair.”

That was little more than a week after Shaffir proved her overwhelming popularity within the party. She placed No. 2 in the January 14 Labor primary, giving her the fourth spot on the Zionist Camp ticket, the joint slate merging Isaac Herzog’s Labor with Tzipi Livni’s Hatnuah — just one rung below Herzog, Livni and former party chairwoman Shelly Yacimovich.

Young blood

It was just over two years ago that Shaffir embarked on her political career. The Labor party was anxious to bring in some young blood, and Shaffir, with her credentials as an outspoken leader of the summer 2011 social justice movement, was seen as a candidate who could attract young voters. Few expected her to serve more than an ornamental function in her first term in the Knesset, or to learn the ropes of parliamentary life as quickly as she did.

Her opponents tend to pooh-pooh Shaffir as a loud-mouthed attention seeker with a penchant for provocation, especially when television cameras are around. But that doesn’t mean it’s been all talk and no action.

Ever since being sworn in two years ago, Shaffir has focused her energies on using her seat in the powerful Knesset Finance Committee to fight for greater budget oversight. As a newcomer to the system, she says she was shocked to discover how many millions of shekels are transferred from one item to another in the secret budget deals among political parties and interest groups, of which the public has little, if any, knowledge. The main targets of her wrath have been the defense establishment and the settler movement, both key beneficiaries of this lack of transparency.

“I was absolutely horrified,” she said in a recent interview with Haaretz. “I couldn’t believe things like this happen. All these deals are being made, and nobody understands what’s going on except for the chairman of the committee and the treasury officials. Most Israelis have no idea where their money is going. They pay lots of taxes, but many of the details of the budget are concealed from them. For example, how much money goes to [the northern border town of] Kiryat Shmona compared to how much goes to [the West Bank settlement of] Hebron, or how much goes to education versus how much goes to defense.”

As a stopgap measure, Shaffir began with filibusters, driving her political opponents mad with endless questions about each budgetary transfer. Then she recruited a staff of volunteers through Facebook to begin investigating every transfer — finding out where the money came from and where it was going, and then posting the findings on her Facebook page.

“Because the treasury tends to refuse to answer a lot of these questions, we decided to look into it ourselves,” she said.

The pressure worked. The treasury eventually broke down and agreed to publish information online on budgetary transfer requests several days before the Knesset Finance Committee was asked to vote on them, rather than on the spot, as had long been the norm — giving its members time to make informed decisions.

In December 2013, Shaffir went a step further when she petitioned the Supreme Court against the treasury and the Knesset Finance Committee for authorizing hundreds of millions of shekels of changes in the budget without the approval of the full Knesset and the cabinet.

Shaffir’s daily altercations with Nissan Slomiansky, the chairman of the Knesset Finance Committee and a member of Habayit Hayehudi, have become legendary — so much so that a recent cartoon in Haaretz had her thanking Slomiansky with a bouquet of flowers after her impressive showing in the Labor primary.

Not long before new elections were called in December, the Knesset Finance Committee was about to convene for its daily session, with Shaffir already poised for action, banging away on her laptop. Within minutes, she was lashing out at Slomiansky, seated at the head of the table, for authorizing yet another handout to an organization affiliated with the settler movement. As the scene played out, the two of them wagging their fingers at one another, Shaffir continued updating her followers in real time via Twitter and Facebook.

In between, she dashed over to a rather unlikely ally on the committee: Moshe Gafni, of the ultra-Orthodox United Torah Judaism party, who has previously served as its chairman. The two exchanged a few words in low voices and planned their strategy for undermining Slomiansky.

A committee member representing the ruling Likud, who asked not to be quoted by name, had this to say about the young Labor lawmaker, as he observed the scene: “She’s doing a fabulous job, and I wish there were more like her, but I really wonder if she would behave had she been representing the coalition rather than the opposition.”

‘It all comes down to the budget’

Born in the coastal town of Netanya, Shaffir grew up in Pardesiya, a small community in the central Sharon region. Her father was an accountant, and her mother a teacher who later joined her husband in the family business. Shaffir, the oldest of three children, has an autistic sister. Before joining the army, she spent a year working with underprivileged children in Tiberias.

Her dream was to become fighter pilot in the air force. But she didn’t make it through flight school and eventually transferred to Bamahaneh, the IDF magazine, where she served as a reporter for the remainder of her service, covering Israel’s 2005 withdrawal from Gaza and the Second Lebanon War in 2006. She went on to study sociology, journalism and music.

After completing her military service, Shaffir received a scholarship to City University London, where she participated in a special program to promote dialogue among future Israeli and Palestinian leaders and earned a bachelor’s degree in sociology and journalism. Upon returning to Israel, Shaffir, who plays the piano, drums, guitar, violin and oud,enrolled in the Rimon School of Jazz and Contemporary Music. Before embarking on her political career, she worked as a reporter and editor at various Israeli publications.

Despite not having any background in economics or finance, Shaffir, who lives in Tel Aviv, made a conscious decision her first day in the Knesset to immerse herself in money matters. “In the end, it all comes down to the budget,” she said. “How the budget is allocated determines whether there is equality and social justice in this country.”

What would be her dream job in politics? “Mostly I’m interested in a position that would allow me to influence prices in the housing market,” said Shaffir. “Any job that would allow me to implement policy in that area would be great.”


Fuente: Haaretz

 

El Album de Auschwitz

Los Judíos de Nagyvarad, Hungría fueron recogidos y «arriados» como ganado a vagones de tren. En el transcurso de 2-3 semanas, a fines de Mayo 1944 y Junio 1944. Toda la familia de mis abuelos paternos corrieron ése destino. Mi abuelo Josef Menajem(55), mi abuela Etus(48), mis tias Elizabeth(22) con su marido Endre(32) y su hijita Marika(4), y mi otra tia Ekaterina(14). De casualidad, estaba de visita en la casa Peszi WOLF SALAMON(20), sobrina de mi abuelo, a quien tambien se llevaron en el mismo cargamento.

Una vez desembarcados del tren, los pusieron en fila, Peszi estaba cargando a Marika en brazos. Llegaron a donde estaba el infame Josef Mengele, quien preguntó a Peszi si Marika era su hija. Al decirle que no, Mengele le dijo que devuelva a Marika a su mama. Todo el grupo familiar fué enviado a la derecha (las camaras de gas), Peszi fué enviada a la izquierda, y fué la única del grupo que sobrevivió para contar la historia. Es así que despues de la guerra mi papá se enteró de lo sucedido.

Desde que descubrí este documento, lo he visto muchas muchas veces, con la esperanza de poder reconocer a alguno de mis parientes…

Lo que se muestra en el video adjunto son fotografías que suceden justamente en Mayo 1944 y es solo parte pequeña del album… El album completo se puede ver con todas sus explicaciones (en inglés), aqui.
Hacer click en el album para ver el video.

Peter Salamon